Lectura de Hoy: Efesios 4:26-27
El estadista norteamericano Thomas Jefferson decía: “Cuando tenga coraje, cuente hasta diez; si tiene mucho coraje, cuente hasta cien. ¡Buen consejo! La ira incontenible puede matar. Leí sobre el caso de una pareja que mató a su pequeño hijo porque este lloraba cuando ellos querían oír música.

La Biblia menciona dos tipos de ira: una que conviene y otra que no conviene. La que conviene se dirige contra el pecado, como en la ocasión en que Jesús expulso a los vendedores del templo. El sentimiento de ira que no conviene es aquel que sentimos ante provocaciones pequeñas o de poca importancia. Pablo recomienda: “no se ponga el sol sobre vuestro enojo.” (Efesios 4:26)

La ira no debe perdurar. Los esposos no deben dormir de espaldas uno al otro a causa de una discusión ocurrida durante el día. Los niños también deben aprender a hacer las paces.

Pablo agrega: “ni deis lugar al diablo” (Efesios 4:27). La ira da al diablo la mejor oportunidad para entrar en nuestras vidas, pues hace que perdamos el control. Satanás está siempre alerta, esperando su oportunidad.

Jesús quiere reproducir su carácter en nosotros, su amor, su mansedumbre, su alegría y su dominio propio. Necesitamos pedirle que su Espíritu nos controle y nos enseñe a perdonar.

Ildefonso Torres