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aflicción, ansiedad, desasociego, dificultades, esperanza, inquietud, inseguridad, manos de dios, precipitado, resistencia, serenidad
Lectura de Hoy:1Pedro 5:7 Version RVR1960
Las dificultades y los problemas nunca andan solos. La ansiedad siempre los acompaña.
La ansiedad es la pena que causa la inseguridad; es la aflicción de esperar por soluciones que nadie sabe si serán posibles. Es necesario eliminar la ansiedad para evitar decisiones precipitadas, medidas que no resuelven nada y desesperación ante una crisis o un problema.
Usted debe volver sobre Dios toda su ansiedad; toda su falta de seguridad y de tranquilidad. Esta no es una actitud evasiva o la de alguien que huye de las dificultades; por el contrario, es un paso decisivo de fe para la solución de cada problema. Entregar a Dios toda su ansiedad es creer en su bondad y en su capacidad para cuidar de nosotros, así como proveer lo que necesitamos en nuestra vida.
Esta seguridad removerá completamente las causas de la ansiedad, es decir, la angustia y la inseguridad.
Entregar su inseguridad a las manos de Dios es una actitud de fe que devuelve a su vida la calma, la serenidad, la esperanza y redobla nuestro poder de resistencia a las dificultades.
Ildefonso Torres