Lectura de Hoy: 1 Corintios 13:4-8
Hay muchas formas de amor. El amor que tenemos por nosotros mismos, que puede ser legítimo y natural, también puede convertirse en un egoísmo ciego. El amor de los padres para con los hijos que, hasta cierto punto, es una extensión del amor que tenemos por nosotros mismos. El amor que un hombre siente por una mujer, que en muchos casos no soporta las luchas de la vida y se deshace con el tiempo.

¿Cuál es la razón por la que el amor se deshace? Podrá haber muchas razones, pero una de ellas se encuentra en la naturaleza de ese amor que depende de los aspectos físicos, exteriores de la persona amada.

El verdadero amor lo encontramos en Jesús, el Hijo de Dios. El, a pesar de nuestra fealdad, causada por el pecado, y a pesar de que no podemos pagarle, dio su propia vida por nosotros.

¡Es ese amor el que usted necesita! Ese es el amor que nos envuelve y nos capacita para amar de verdad, sin esperar nada en retorno. Y el beneficio que el amor de Dios nos trae es una vida alegre, útil y feliz.

¡Dios nos ama en Jesucristo repartiendo ese amor!

Ildefonso Torres