Lectura de Hoy: Juan 9:1-5 Version RVR1960
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La ignorancia puede ser representada por la obscuridad, por la ceguera. Una persona sin conocimiento profundo del cuerpo humano no puede realizar una cirugía, estaría perdida, sin saber qué hacer, tanteando de un lugar para otro, como si estuviese en una casa obscura.

Otra realidad representada por la obscuridad y la ceguera son nuestras obras, como la corrupción, el robo, la mentira, el adulterio. Son cosas que hacemos a escondidas, sin que los demás tengan conocimiento de ellas. Quien practica estas cosas no quiere ser descubierto, y por lo tanto, da a los demás la idea de poseer un carácter verdadero, una vida honesta y justa.

Un ciego de nacimiento fue visto por los discípulos de Jesús. En este caso, la ceguera en si no hacía de este hombre una persona ignorante o mala.

Los discípulos, por otra parte, mostraron su ignorancia al preguntarse si alguien tenía la culpa de que aquel hombre hubiera nacido ciego. Nuestro mundo, lleno de personas con deficiencias físicas y de carácter, es un campo lleno de oportunidades. Oportunidades para llevarles a la luz.  Jesus transforma la obscuridad de las vidas en conocimiento de Dios y salvación. Revela las obras y pensamientos escondidos. ¡Jesús es la luz del mundo!

Ildefonso Torres