Lectura de Hoy: Mateo 5:13
Para Jesús, sus seguidores serían la sal de la tierra. ¿Cuál es el significado de esas palabras de Jesús para la vida práctica de sus seguidores? Piense en dos aspectos de la sal. Primero, la sal tiene un sabor y una función distintos de los elementos sobre los cuales actúa. Segundo, la sal penetra en los elementos sobre los cuales es colocada.
Así como la sal tiene sabor y una función distintos de los elementos de los cuales actúa, los cristianos deben conservar los valores que representan su identidad. Deben mantener sus ideales y sus principios, sin importar las presiones o las amenazas. Solo así podrán causar un impacto en la sociedad. El cristiano es la sal de la tierra. Esto significa que su influencia en la sociedad depende de su diferencia y no de su intimidad con el mundo.
Así como la sal conserva sus alimentos, los principios de moral y justicia de la fe cristiana tienen una fuerza capaz de controlar las tendencias egoístas de los hombres, evitando que la sociedad se degenere y acabe en anarquía.
Al conservar su identidad, sus valores, sus ideales y principios, el cristiano produce cambios radicales en la sociedad donde vive. Los discípulos de Cristo son llamados a traer la pureza de Cristo a un mundo donde los valores morales son bajos cambiantes o inexistentes.
Ildefonso Torres